Cuando vuelvo del paseo el piso estaba vacío. Me pongo un rato con el portátil, y cuando me canso, decido ir a ducharme. Voy a salir por la puerta cuando, de repente, allí estaba.
No recuerdo ya si se encontraba encima del libro, dentro (entre la primera hoja y la tapa) o al lado, pero el caso es que había una nota, de pequeño tamaño, proveniente de un folio mal recortado, que ponía en letras mayúsculas y varias veces escritas:
NO ESTÁS
SÓLO
SÓLO
....
La primera vez que lo leí no le presté atención, pero cuando iba a soltarla una oleada de algo difícilmente describible me invadió, un día antes justo había comentado con unos colegas lo fácil que resultaba para alguien un poco puesto entrar en una casa.
En esos momentos te invaden de todo menos "racionales". Impulsivamente entré en cada cuarto, miré en cada hueco y en cada armario. Poco a poco me acerqué al último rincón oscuro en el que buscar. Cogí el pomo de la puerta, tiré y... nada. Eché la puerta, cogí un cuchillo, me puse en el salón donde se puede ver a alguien venir y llamé a mi compañero de piso. Él no sabía nada de la nota, tampoco mi parienta.
Pensé en ducharme, pero no me encontraba agusto, me sentía incómodo, inseguro. Acto seguido cogí tres cosas y me fuí, por lo menos enterarme de el porqué de esa nota... imagina el desenlace.